
Demon's World: Una Joya Oculta del 'Run and Gun' de los 80s
Historia de Demon’s World
Demon’s World, conocido como Horror Story en Japón, es un juego de arcade lanzado en 1989 por Toaplan, publicado por Taito en Japón y por Catalina Games en América del Norte. En este juego, los jugadores asumen el papel de cazadores de fantasmas enfrentándose a una plétora de espectros y monstruos liberados por un demonio rey en la Tierra.
Características del Juego
Este juego de desplazamiento lateral se caracteriza por sus diez etapas lineales y autodesplazables que presentan un desafío creciente. Armados con un arma inspirada en la franquicia Ghostbusters, los jugadores disparan a los fantasmas y monstruos, recogen potenciadores para mejorar sus armas y enfrentan jefes al final de ciertas etapas. El juego también incluye elementos de plataformas, permitiendo a los jugadores realizar saltos dobles para navegar por los niveles.
Una de las particularidades de Demon’s World es la diversidad de sus ambientaciones, que van desde escenarios inspirados en el lejano oriente hasta un barco pirata fantasmal y el Viejo Oeste americano embrujado. En estas locaciones, los jugadores se encuentran con criaturas de diversas mitologías, así como con monstruos clásicos del cine de terror occidental.
Desarrollo y Lanzamiento
La música del juego fue compuesta por Osamu Ōta y Toshiaki Tomizawa, mientras que el arte estuvo a cargo de Atsushi Kawaguchi. En 1993, el juego fue portado a la PC Engine Super CD-ROM², donde se publicó exclusivamente en Japón con el título original Horror Story, incorporando una banda sonora arreglada y contenido adicional como un nuevo jefe intermedio.
Recepción y Legado
Aunque la recepción crítica fue mixta, Demon’s World logró una posición notable en las listas de popularidad de juegos arcade en Japón. En años recientes, los derechos de Demon’s World, junto con otros títulos de Toaplan, fueron adquiridos por Tatsujin, una compañía fundada por un exmiembro de Toaplan, lo que asegura la preservación de este clásico arcade.
Conclusión
Demon’s World es un título que, si bien puede no haber alcanzado el estatus de culto de otros juegos de su época, ofrece una experiencia divertida y desafiante para los aficionados a los juegos de arcade clásicos. Su mezcla de acción frenética y ambientaciones únicas lo convierten en una joya oculta que vale la pena explorar.
Si tienes la oportunidad de jugarlo, ya sea en su versión original o en su adaptación para PC Engine, no dudes en sumergirte en esta emocionante historia de cazadores de fantasmas.